Justicia poética

Un caso de justicia poética digno de celebrar es que la miseria de la Junta de Gobierno del ICA de Santiago le haya regalado a nuestra compañera un nuevo e inolvidable minuto de gloria.

Beatriz Estévez Fontela les había hecho justicia de la buena con su celebrado relato «Mutua con M de muerte», pero entonces su brillantez y precisión letal les dejó inermes, muertos de rabia. Así que, por una coincidencia astral algún huidizo animal agazapado en el anonimato de los chats del J2, no diré que como topo, intuitivo animalito con toga de visón que socava el poder establecido, según la mejor simbología revolucionaria. Sino como roedor correveidile, dispuesto en todo momento y lugar a carcomer los pilares del decoro y la dignidad de la que en apariencia se inviste.

Qué otra cosa cabe decir de quienes ostentando la dignidad de primus inter pares rehúsan apoyar e incentivar el legítimo ejercicio del derecho de huelga o manifestación de sus colegiados movilizados colectivamente por la defensa de sus derechos e intereses profesionales y, en cambio, consagran su tiempo y sus desvelos a perseguir uno a uno a esos mismos compañeros, abusando de su contingente poder. Sabedores de que ninguna razón les asiste.

La propuesta de sanción mediante multa de mil euros a Beatriz Estévez es ridícula de principio a fin.

De principio porque invade el ámbito de las comunicaciones privadas y la libertad de expresión de un colectivo de profesionales legítimamente agrupados en torno a una lícita función profiláctica y reformista, de crítica y mejora profesional, respectivamente. En cuanto a su fin, porque busca dar de manera ilegítima un inmerecido escarmiento ejemplarizante a quien es absolutamente inocente; como aviso a navegantes para acallar las merecidas críticas.

Y en cuanto a los burdos medios utilizados, porque vulneran los más elementales principios de proporcionalidad e intervención mínima del derecho sancionador.

Pero por encima de la injusticia del qué, la grosería del cómo y la vergüenza del por qué, sobresale la singular personalidad de Beatriz que, cuanto más señalada está por ellos, más les señala en un inesperado y sorprendente efecto boomerang.

Les señala el fumus argumental de su relato «Mutua con M de muerte» que ha vuelto a estar de rabiosa actualidad, hoy en la mente y en la boca de todos. Y les señala el hecho de que, por pura justicia poética, en horas tan decisivas para nuestra lucha, estos atribulados adversarios intestinos nuestros hayan conseguido unirnos a todos y cada uno de nosotros, desde Mareas a 101, pasando por Venia o Plataforma en un solo grito de rechazo a la sanción y de reprobación a la actual Junta de Gobierno del ICA de Santiago.

Gracias Beatriz por regalarnos éste anticipado minuto de la gloria unitaria que tanto necesitamos y precisamente tú nos anuncias siempre.

ADDENDA

Dos letradas que apoyan explícitamente la huelga de la abogacía convocada por el Sindicato Venia el 21 noviembre de 2023 han sido sancionadas por el ICA de Santiago de Compostela, por las expresiones usadas en un chat de mensajería instantánea de WhatsApp del que eran miembros (donde el ICA de Santiago de Compostela no participaba en tal calidad, y por lo tanto no era miembro de dicho chat).

Ambas personas fueron objeto de un proceso sancionador conforme al Reglamento Interno de la institución por las expresiones usadas en dicho WhatsApp, usando para ello unas capturas de dicho WhatsApp que fueron obtenidas de forma ilegal, al no contar con el consentimiento de las afectadas, vulnerando su derecho a la intimidad y al secreto de las comunicaciones (art. 18.1 y 3 CE) y los arts. 8 y 10 del Convenio Europeo de Derechos Humanos.

Dicha intromisión incluso podría constituir un delito del art. 197 del Código Penal, dado que además la institución se ha negado a facilitar a las afectadas la identidad de la/s persona/s, que sin su consentimiento ha/n facilitado dicha comunicación privada, institución que, en lugar de defender a sus colegiadas y sus derechos constitucionales fundamentales y proceder al inmediato archivo del expediente en aplicación el principio de primacía de los derechos constitucionales, ha dictado sendas  resoluciones sancionadoras.

Es la primera vez que en este conflicto colectivo que un ICA utiliza documentos que han sido obtenidos mediante la intervención directa o indirecta (a través de terceros) de comunicaciones privadas de personas físicas, sin el consentimiento de las mismas, con el único fin de tomar conocimiento de la comunicación privada de los partícipes, y sancionar expresiones que permanecían en la esfera privada y por ello nunca podían ser objeto de sanción al no trascender a terceros ajenos a dicho WhatsApp.

Dichas sanciones constituyen una clara forma de represalia política por su apoyo y participación en la huelga, un ataque a los derechos fundamentales de la ciudadanía, y un intento de amedrentar a todo el colectivo que defiende la dignificación profesional, la pasarela al RETA, el reconocimiento del trabajo en el Turno de oficio como una relación laboral de carácter especial y el derecho a las cotizaciones sociales por el trabajo en el turno de oficio.

LISTA APOYOS A BEATRIZ ESTÉVEZ FONTENLA