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El Ayuntamiento de O Porriño está poniendo en valor su zona de equipaciones escolares y deportivas con la humanización ejecutada en el marco del Plan de Mellora da Seguridade dos Viarios Municipais (DepoRemse) de la Diputación de Pontevedra. Los diputados provinciales Carlos López Font y Santos Héctor, acompañados por la alcaldesa, Eva García de la Torre y representantes municipales, visitaron hoy el entorno, que luce un aspecto totalmente renovado de cara a el comienzo del nuevo curso escolar. Las obras del plan DepoRemse, con un importe de 410.598 euros, están financiadas al 85% por la Diputación y la un 15% con fondos propios del Ayuntamiento y tienen como ámbito de actuación la calle Donantes de Sangre, una zona de especial tránsito al acoger el colegio Xosé Fernández López, el Instituto de Enseñanza Secundaria, la escuela infantil y el área deportiva del pabellón municipal.

Los trabajos están en su última fase de ejecución y consisten en la rehabilitación del firme en toda la calle Donantes de Sangre, así como la adaptación de los pasos de cebra y aceras existentes al modelo de movilidad de la Diputación. El proyecto incluye también la pavimentación del camino existente que comunica esta calle con Doctor Paz Varela y la colocación de nuevas aceras en la calle Fernández Areal. Asimismo, los trabajos suponen la eliminación de zonas de estacionamiento para ampliar las aceras, el acondicionamiento de las zonas de estacionamiento del bus escolar, con la ampliación de este área y el alargamiento de las aceras, así como el aumento de la iluminación en los pasos peatonales y la mejora de los niveles de iluminación del vial. Por último, las obras incluyen también el rediseño de toda la sinalética en la zona de actuación.

El diputado provincial Carlos López Font calificó la actuación como «ejemplar» y destacó la transformación de esta zona para la mejora de la calidad de vida del vecindario de O Porriño, «donde las personas van a ocupar aquellos espacios que antes ocupaban los coches». En este sentido, destacó que el proyecto elegido por el Ayuntamiento «coincide plenamente y se ajusta a la idea que tenemos en este gobierno provincial de una movilidad segura y transformadora». «El DepoRemse -añadió Font- busca una movilidad y seguridad propia de los tiempos en que vivimos y humanizar entornos. En este caso, tenemos uno de los mejores ejemplos porque en esta zona están el instituto, el centro escolar, la escuela infantil y el pabellón y más abajo, donde finaliza la actuación, comunicamos con edificios públicos como la Tesorería de la Seguridad Social, el Centro de Salud y los Juzgados. Por lo tanto estamos en un entorno en el que habitan personas, en el que vienen muchas crianzas y personas #mayor a la estas instalaciones, y el cambio que veo es absolutamente radical. Será una mayor satisfacción cuando dentro de unos días comience el curso escolar y los padres y madres puedan tener una mayor seguridad viaria con sus hijos y hijas en este entorno».

López Font destacó la excepcional relación de la Diputación con el Ayuntamiento de O Porriño, materializada en inversiones de 8 millones de euros en el municipio desde el año 2015, entre ellos el Plan Ayuntamientos que permitió realizar más de una veintena de obras y sufragar actividades culturales, además de la línea de empleo, que permitió en estos años contratar a 147 trabajadores y trabajadoras.

Por su parte, la alcaldesa Eva García de la Torre, agradeció la colaboración de la institución provincial desde hace cinco años y destacó que las obras visitadas «abarcan el ámbito que más servicio público da a la ciudadanía y que necesitaba de una nueva mirada» dentro de la filosofía de las ciudades sostenibles.

«Necesitamos -añadió- que la Diputación siga mirando para los ayuntamientos, siga apostando por este tipo de actuaciones y por subvencionar planes que hagan las ciudades más humanas. Nosotros queremos ser una alternativa residencial en toda la comarca. Pero para eso tenemos que hacer en O Porriño zonas más pensadas para los ciudadanos y menos para los vehículos». García señaló que esta obra «es el primer paso para ver que el concepto de ciudad que compartimos va haciéndose realidad. En cierto modo, palía un poco el abandono de la Xunta».