O Son do Camiño calienta motores para un viernes de música sin descanso: Kasabian, Kase.O, Amaia y Bad Gyal, entre los grandes nombres del día

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El segundo día del festival O Son do Camiño promete ser una jornada intensa, repleta de talento, emociones y una programación que no da tregua desde la apertura de puertas a las 16:00 hasta altas horas de la madrugada. Este viernes, los escenarios del Monte do Gozo se preparan para recibir a una mezcla explosiva de pop, rap, rock y electrónica.

Los encargados de abrir fuego son Aiko (16:20h, escenario Estrella Galicia) y Merino (17:00h, escenario Xacobeo), seguidos muy de cerca por el dúo vallisoletano Siloé, que se sube al escenario Estrella Galicia a las 17:50h. La tarde sigue con la esperada actuación de Amaia (18:50h, escenario Xacobeo), una de las voces más queridas del panorama nacional, que seguro emociona con su particular sensibilidad y puesta en escena.

A las 20:00h llega Carolina Durante, una de las bandas más enérgicas del indie español, mientras que el rap toma el protagonismo a las 21:10h con Kase.O, leyenda del género y maestro de ceremonias que no deja indiferente. El plato fuerte de la noche llega a las 23:00h con Kasabian, la icónica banda británica que regresa a Galicia con su potente directo y grandes éxitos.

La madrugada no afloja. A las 00:50h, Bad Gyal toma el escenario Xacobeo con su mezcla de dancehall y reguetón, y a partir de las 02:15h será Juan Magán quien mantenga el ritmo con su inconfundible estilo de electro latino.

Mientras tanto, el escenario Son Electro by Repsol garantiza un viaje continuo de electrónica de calidad: Karras Martínez (19:00h), Héctor Llamazares, Mano Le Tough, Âme (Live), Adiel y Andrés Campo se encargan de que la música no se detenga hasta bien entrada la madrugada.

Todo apunta a que este viernes será uno de los días más intensos y variados del festival. El Monte do Gozo se convierte, una vez más, en el epicentro de la música en Galicia. Una jornada donde el único plan es dejarse llevar.

Porque en O Son do Camiño, los viernes no se improvisan: se celebran con música.